Argentina celebra el título. (Foto: Conmebol) |
Lo que cuesta vale. El sufrimiento y la tensión duró hasta el final, pero la recompensa es inigualable: la alegría de todo un país que volvió a gritar “Campeones de América”. La Selección Argentina derrotó 1-0 a Colombia con gol de Lautaro Martínez en la final disputada en el Hard Rock Stadium de Miami y sumó así su cuarto título consecutivo. Los campeones del mundo ahora también son bicampeones de América.
La primera acción de
peligro se dio a los pocos segundos de haber comenzado el partido. Luego de una
jugada desde la derecha, Montiel sacó un centro atrás y Julián Álvarez no logró
conectar la pelota de lleno para darle dirección.
Colombia respondió rápidamente con una acción colectiva que
culminó en los pies de Jhon Córdoba, quien inquietó el arco argentino con un
remate que rozó el palo derecho.
El equipo de Scaloni empezaba a encontrar sociedades en
campo rival. Di María, Tagliafico y Messi se juntaron para romper líneas y
finalizaron una gran jugada con un remate del capitán, que fue desviado por
Julián y controlado sin problemas por el arquero.
Los minutos trascurrían y el partido seguía trabado,
disputado en la mitad de la cancha. Jefferson Lerma intentó lastimar de larga
distancia, pero Dibu Martínez intervino con una volada perfecta para tapar el
tiro contra su palo derecho.
El complemento
comenzó con un ritmo dinámico. Ángel Di María tuvo en sus pies la chance de
romper el cero, pero el arquero Vargas tapó un excelente remate cruzado que se
metía pegado al caño izquierdo.
A los 19’, la Albiceleste recibió la peor noticia: su
capitán Leo Messi tuvo que pedir el cambio debido a una molestia física. Sin
embargo, el equipo siguió yendo a buscar la victoria. Y luego de una acción
desde la izquierda, Nicolás González llegó dentro del área para marcar el
primer tanto del encuentro, pero fue anulado por posición adelantada de
Tagliafico en el inicio.
El mismo Nico González volvió a paralizar los corazones de
propios y ajenos. Luego de un centro al segundo palo de Di María, el hombre de
la Fiorentina la quiso bajar con un cabezazo bombeado, que por poco no encontró
destino de arco.
Los 90 minutos no fueron suficientes para romper la paridad.
Esta final cambiante, pareja y con emociones en ambas áreas, pasó al alargue
con un empate sin goles.
La triangulación fue
perfecta. Argentina pudo haber roto el cero con una jugada desde la derecha en
la que Di María conectó con De Paul y Rodrigo lanzó un centro atrás que otra
vez encontró a González dentro del área, pero el arquero Vargas logró tapar el
remate sin dar rebote.
Parecía que el
partido se moría. Que los penales eran inevitables. Pero allí apareció la
habilitación perfecta de Giovani Lo Celso, un toque sutil, de primera, para
dejarlo de frente al arco a él. Lautaro Martínez, en una de las pocas pelotas
que tuvo en sus pies, definió fuerte entre las manos del arquero para romper
esa red que esperaba abrazarse con el balón.
Argentina se abraza, Argentina festeja. La alegría es albiceleste, una vez más. Argentina bicampeón de América. Argentina campeón de campeones. ¡Somos campeones… otra vez!
*Con datos de AFA.
*Foto: CONMEBOL.
0 Comentarios